Es necesario aprender a debatir sin herir. Debemos ser capaces de conversar fraternalmente sobre los desafíos de la ciencia política en Uruguay. El artículo
que motivó la réplica jamás pretendió ofender a nadie. Buscó verbalizar alguno de los problemas y desafíos que investigaciones recientes sobre la evolución de la ciencia política uruguaya han señalado con prudencia. No es cierto que, al invitar al pluralismo, se proponga una visión cómoda y provinciana de la ciencia política. Defender el pluralismo no implica renunciar a los estándares sino, simplemente, admitir que es posible hacer ciencia política de muchos "buenos" modos al mismo tiempo. La diversidad epistemológica, teórica y metodológica lejos de ser un problema representa una espléndida oportunidad.