El año 2017 en el Ecuador ha sido caracterizado, primero, por la victoria electoral de Alianza PAIS y, después, por el conflicto dentro del partido oficialista que se ha agudizado rápidamente. Con la salida de la presidencia de Rafael Correa —quien había gobernado el país desde 2007— la política ecuatoriana ha entrado a una nueva fase que se caracteriza por realineamientos políticos y una incrementada incertidumbre política. Al mismo tiempo, la situación económica sigue siendo difícil, imponiendo restricciones importantes al nuevo gobierno de Lenín Moreno. En el artículo se revisará el turbulento año 2017, poniendo énfasis
en la lucha por la “Revolución Ciudadana” que se está dando entre los seguidores del nuevo presidente y los partidarios de su predecesor.